Alejandro Sanz, pese a que en su día se rumoreó mucho que era de la cáscara amarga, siempre ha sido un poco pichabrava. En el año 1995 fue muy sonado su romance con una jovencísima Alba Molina, la hija de Lole y Manuel que años después formaría ese grupo tan imprescindible como eran Las niñas. Pero como todo en esta vida, aquella historia de amor se acabó y Alejandro Sanz se reinventó como Lara Dibildos y se echó a las calles a olvidar las penas. Y como compañero de correrías eligió a otro famoso muy noventero como es Iván Zamorano, futbolista del Real Madrid que estuvo relacionado con la miss Eugenia Santana.
Aunque el titular de la revista Nuevo Vale habla de «locas fiestas», en realidad Zamorano y Sanz lo único que hicieron es ir juntos a un concierto de Paco Ortega, cantante y compositor sevillano muy conocido en los ochenta por su hit Entre la hiedra y que incluso fue al Festival de la OTI junto a Isabel Montero. Vaya, que muy loca, muy loca, no debió ser la cosa.
Pero lo mejor es el final del artículo, cuando el redactor teoriza sobre un posible disco conjunto de Zamorano y Alejandro, por la cara, aunque el deportista chileno echa balones fuera asegurando que, aunque grabó una canción benéfica, no ha pensado encauzar su futuro por ahí. Normal.
More from my site
De Francia o de escaparetes: canciones sobre maniquíes
Duetos que primero te gustaron y luego acabaste odiando
Canciones con doble sentido: el retonno
A todo Flash: «Detienen al novio de Rociito» (1995)- A todo Flash: «Alejandro Sanz, a punto de morir» (1995)
Apueste por Una: Helen Lindes vs Eugenia Santana
¡¡No me ha podido gustar más este post!!