Por Joaquín Hurtado*
Érase una vez una niña que quería ser, sí o sí, cantante. Paty Sirvent soñaba con ser una estrella a toda costa. Lo intentó haciendo el casting para la Onda Vaselina (grupo al que sí logró pertenecer su hermano), pero no dió la talla. Papá estaba dispuesto a complacer a la niña a cualquier precio y organizó un casting para crear un grupo juvenil a su medida, la banda pre-adolescente que siempre ha estado presente en la escena musical mexicana. Comenzaron las pruebas hasta dar con Angie, Litzy, Tabatha y una tal Bianca que pronto desapareció del proyecto.
Jeans era la réplica femenina y noventera a los clásicos Menudo o Magneto. Un grupo sin más pretensiones que las de hacer caja hasta la extenuación de las niñas. Los papás de Paty se encargaban de casi todo lo relacionado con el manejo del grupo, el management, los contratos, las actividades extra-escolares y el buen comportamiento de las chicas bajo una disciplina casi militar.
El mayor problema de Jeans era ese, que todo giraba en torno a Paty y su familia, sin importar demasiado el resto de las chicas. La voz de la “líder” no era la mejor del grupo. Paty no era la más agraciada, ni la que tenía la mejor dicción, ni el mayor desparpajo, pero estaba claro que la niña tenía que llevarse el papel protagonista.
Los royalties no se repartían de la misma forma, el cariño recibido por quienes llevaban las riendas no era equitativo y pronto empezaron las salidas, las broncas entre padres… Eran las propias ex integrantes del grupo quienes iban denunciando las presuntas miserias de la familia Sirvent en diferentes programas de televisión una vez que terminaban su relación con el grupo. Si una abría la caja de pandora, la otra echaba más leña al fuego. Demandas, amenazas, acusaciones de malos tratos, vejaciones, “estás gorda”, “no sabes cantar”…un festival de improperios que fue minando la historia del grupo.
A pesar de todo, y durante varias temporadas, la popularidad de Jeans eclipsó la de otras formaciones y cada movimiento o cambio de integrante se anunciaba en multitudinarias ruedas de prensa, hasta que el público empezó a perder interés en algo que, cada vez, era menos natural y ya casi indefendible.
Hasta trece chicas desfilaron por Jeans, incluso algunas de ellas fueron elegidas por convocatoria en programas de televisión.
Y así hasta 2008, el año de disolución de Jeans que acabaron su carrera musical siendo trío. Los siguientes años sirvieron a casi todas las ex Jeans para reciclarse como presentadoras, concursantes de realities o actrices de telenovelas. Prácticamente todas las componentes del grupo probaron suerte en las diversas posibilidades que ofrecía el mercado.
2015 fue el año de su resurrección. Angie, Karla, Regina y Melisa aprovecharon el tirón de la nostalgia noventera para planificar su reencuentro, esta vez dirigido por Ari Boroboy, mítico componente de Onda Vaselina (ahora OV7) y hoy uno de los principales empresarios del espectáculo azteca. Aquellas adolescentes son ahora cuatro espectaculares mujeres que están reviviendo la misma popularidad cosechada 20 años atrás. En su último disco JNS rinden homenaje a himnos como “Yo quiero bailar” o “Me haces tanto bien”
Nada hacía presagiar que el éxito volvería a desbordarse y la familia Sirvent, apartada del proyecto y dueña de la marca, de nuevo intentó sacar tajada del fenómeno pidiendo una cantidad desorbitada por usar el nombre del grupo. La solución fue suprimir las vocales y ser JNS. El reencuentro dió paso a un regreso con todas las de la ley.
La vida daba una segunda oportunidad a cuatro de las sufridas Jeans llegando a abarrotar el Auditorio Nacional en varias ocasiones. En una de sus presentaciones JNS reunieron a todas las chicas que formaron parte del grupo. Todas menos Paty, que veía la escena desde el sofá de su casa comiendo helado.
En la actualidad JNS es uno de los principales reclamos del exitoso “90´s Pop Tour”, con el que recorren todo México, mientras que Paty ahora es PatyLú, una popular cantante infantil a la que acompaña “La Vaca Tomasa”
*Joaquín Hurtado es periodista musical, coordinador de Radiolé y presentador del morning CaféOlé.