Olvido y perdón: famosos que la cagaron pero ya no nos acordamos

Cometer un error siendo un personaje público puede ser motivo de tirar una carrera por la borda. Quien dice error dice un plagio, unas declaraciones desafortunadas o sencillamente una ética profesional más cuestionable que los métodos educativos de la señorita Rottenmeier.

Hay famosos que la cagan y difícilmente remontan su carrera, como Hulk Hogan, al que unos comentarios racistas le valieron que WWE, la empresa donde más éxito cosechó, borrase su nombre de toda placa, salón y marquesina y fingiese que nunca hubiese existido. Otros, sin embargo, la cagan y tiran para adelante como si nada. Recordemos algunos casos de rostros populares que consiguieron el olvido y el perdón.

Ana Rosa Quintana

La reina de las mañanas de Telecinco, una mujer que le pone su nombre a su programa, a su revista y a todo lo que pueda, porque ella mola mazo y es muy buena profesional. Ana Rosa Quintana, quien de lunes a viernes y desde plató analiza la actualidad política, está por encima del bien y del mal, y nada puede con ella ni con su imperio. Ella habla en el minuto de silencio que se guardó en los atentados de París, comenta que los gays viven en hábitats, y que afirma que ni que fuesen negros en su programa para tener los mismos recursos que otros compañeros (un polígrafo en este caso). Además consiguió capear en el año 2000 con el caso de plagio de su novela ‘Sabor a hiel’, cuando se descubrió que la novela que firmó y presentó estaba escrita por un cuñado resentido que a su vez plagió dos novelas diferentes. Recuerdo cuando en ‘Sabor a ti’ comentaban las revistas y estaba su caso en las portadas y ella se centraba en comentar las noticias secundarias de los lados.  Y a pesar de engañar a mogollón de lectores -se hicieron varias ediciones de la novela-, ahí está la tía, como una institución. «¿Te digo a quien se la chupaste tú para llegar a dónde estás, Ana Rosa», preguntó en cierta ocasión María Jiménez, a lo que AR le respondió que había estudiado la carrera de periodismo y que había trabajado de corresponsal. Pero de a quién le realizó felaciones, ni mu.

Lucía Etxebarría

Admito que esta señora me interesa poco, y lo mínimo que llama mi atención es porque hace un par de años participó en ‘Campamento de verano’ en Telecinco. Ella contó que se lo hicieron pasar canutas, que qué malo es Mediaset y este verano ha publicado en Facebook varios post comentando qué juicios ha ganado y tal, y siempre se pone de persona respetable que se dedica a escribir y no al circo mediático. Ella olvida que ya le han pillado varias veces plagiando, hasta el punto de que en su biografía de Wikipedia hay un apartado dedicado al plagio en su obra, así que lo mismo no hace siempre las cosas bien y derechas.

Antonio Orozco

Coach de ‘La voz’ y artista que está triunfando como Los Chichos en los últimos años. A Antonio Orozco lo conocimos cuando su disco ‘Un reloj y una vela’ y el single ‘Locura de amor’ patrocinaban ‘Los Simpson’ en Antena 3 por las tardes. Una canción que tenía una letra muy similar –aquí podéis ver una comparativa– a una de Revólver, ‘Lisa y Fran’. Según se puede leer en Internet -yo no he encontrado nada publicado en ninguna revista- Carlos Goñi denunció al joven Orozco y ganó y el tema se retiró de las radios. Y en 2015 se dijo que su nuevo single también se parecía a otro tema de Refuse.

Lydia Lozano

Poca gente puede afirmar que una persona desaparecida y declarada difunta está viva, recibir palos y demandas hasta en el DNI, recular diciendo que sus fuentes la engañaron y luego seguir trabajando como si nada. Pero Lydia Lozano es como el corcho y como las heces, consigue salir a flote siempre, y ni haber afirmado que Ylenia está viva y que no se tiró al río al grito de «pertenezco a las aguas» ni nada puede hundir su carrera como periodista. Que esto me recuerda al vídeo de ‘Sakura’ de «esa es la Ylenia, llama al ‘A tu lado’, corre».

Rosa Villacastín

A mí esta señora siempre me ha parecido que proyecta tenerse una gran estima y ser una señora del periodismo rosa, una eminencia. Su forma de ser da a entender que ella no hace el periodismo carroñero de otros compañeros, que ella tiene clase y estilo. Pero a inicio de los 90 era una harpía que publicó que Amparo Muñoz tenía sida en la portada del Diario Ya, y más tarde afirmó incluso que estaba en fase terminal. La Miss y actriz malagueña, que había tenido problemas con las drogas, fue defendida por algunos profesionales como Luis María Ansón. Más allá de lo asqueroso que me puede parecer el publicar el estado serológico de nadie, nunca nadie pudo probar que tuviese el virus. Rosa Villacastín se justificó diciendo que la información salió por falta de tiempo, porque médicos prestigiosos le dijeron que Amparo había estado ingresada «y tenía que creerlos», que Amparo nunca presentó unos análisis que mostrase que no tenía el virus. Que es una gran justificación, yo digo que tú tienes sida y si tú no me enseñas un análisis yo tengo la razón.

Javier Cárdenas

El rey de las mañanas de Europa FM con su programa ‘Levántate y Cárdenas’, en el que reparte estopa cada vez que puede. Lo mismo se enerva hablando de si tal líder de un clan de narcotráfico ha quedado libre por falta de huevos de las autoridades judiciales, critica los recortes sociales, o dice que Artur Mas le da «asco absoluto» por su gestión de la Generalitat. Parece olvidar que él saltó a la popularidad mediática entrevistando a personas que a veces parecían tener graves problemas psicológicos, y otras eran directamente discapacitados intelectuales, con los que charlaba para reírse de ellos. De hecho, hace no demasiado el Constitucional dio la razón a un ciudadano con un 66% de discapacidad física y psíquica del que Cárdenas se burló en una entrevista en el año 2002. Pero él va de justiciero por la vida.

José María Cano

El que fuese compositor del 50% de los temas de Mecano usaba una negra para crear su arte. No, no me refiero a las canciones del grupo, sino a sus cuadros, pues desde hace unos años es artista plástico y principalmente realiza reproducciones en gran tamaño de noticias de periódicos. En 2011, Lucinda Ugarteche, una muchacha que trabajaba en su casa en calidad de asistenta, contó en Interviú que los cuadros lo realizaba ella y otros trabajadores contratados de manera ilegal -un poco en el mismo rollo de Antonio de Felipe en la actualidad-.  José María decía que nanay, que él es el pintor y que ella era una trabajadora que iba cuando le salía del níspero, aunque Lucinda afirma que a veces tenía jornada de más de diez horas encerrada en el taller haciendo cuadros. No he podido encontrar cómo acabó el caso.