Por Juanma Fernández*
Cuando hace unos días mi queridísimo amigo Piscis, Mike Midnight, me proponía escribir un texto a modo de artista invitada con motivo del décimo aniversario de Sufridores en casa, tuve muy claro que quería hablar sobre las series de infancia. ¡Cómo no hacerlo teniendo en cuenta que mis padres me dormían cantándome la canción del ‘Inspector Gadget’ o la primera cinta de casette que recuerdo es una recopilación de canciones de series como ‘Dragones y mazmorras’, ‘David el Gnomo’ o ‘D’Artacán’!
Se me pasó por la cabeza hablar de cómo se emitían entonces estas series cuando no existían canales como Boing o Disney Channel. ¡Qué tiempos aquellos en los que Telecinco emitía ‘Oliver y Benji’, ‘Caballeros del Zodiaco’ o los ‘Power Rangers’ en el horario actual de ‘Sálvame’, o TVE series como ‘Alfred J. Kwak’, ‘Mofli’ o los ‘Trotamúsicos’ después del Telediario!
Pero entonces me encontré de sopetón en casa con las siete bolas de dragón, las temporadas en DVD o las figuritas de Goku, Vegeta, Trunk y Piccolo y recordé que si hay una serie que ha marcado mi infancia y la de muchos niños fue Bola de dragón.
Cuando la serie se emitió en España, Extremadura no tenía entonces cadena autonómica. Sin embargo, sí podíamos ver Canal Sur, que empezó a emitir la serie a partir del 91, sólo un año después de que TV3 la estrenara como ‘Bola de Drac’.
Recuerdo vagamente que sólo pudimos ver hasta la saga de los androides y que no sería hasta años después, con su emisión en Antena 3, cuando no sabríamos de la existencia de Bubú. Pero, ¿por qué estas locas emisiones en las autonómicas?
Pues al parecer, según publicaba Vicente Ramírez en su libro ‘La biblia de Dragon Ball’, la escena en la que el doctor Gero muere a manos del androide C-17 fue el detonante que hizo que estos canales eliminaran por un tiempo la serie de su programación.
No fue lo único que descubrí gracias a su libro. Una de las cosas que más me impresionó es que la voz del maestro Mutenroshi la puso… ¡Mariano Peña! Es decir, que Duende Tortuga tenía la misma voz que Mauricio Colmenero.
Y eso por no hablar de los cinco minutos de Namek. Pero, ¿cómo, por qué aquel planeta tardó varios capítulos en explotar si lo iba a hacer en cinco minutos? Pues parece ser que porque Freezer no sabía cuánto eran cinco minutos en tiempo terrícola y porque sobreestimó su poder.
Aunque para sorpresa mayúscula las versiones porno de la historia, o cómo realmente se conoce a estos géneros: yaoi y el hentai. El primero retrata relaciones homosexuales, mientras que el segundo habla de relaciones heterosexuales.
Pero a lo que no daba crédito era a las relaciones que se formaban: Gohan y Piccolo, la favorita; Goku y Piccolo, Goku y Vegeta, Gohan y Trunks, o las más extrañas de Broly y Piccolo, Trunks y C17 o Célula y Piccolo.
*Juanma Fernández es periodista y crítico de televisión, director de Bluper.es.