De profesión, presentadora de continuidad

Por Mike Medianoche

Desde Sufridores estamos siempre atentos a las dudas y peticiones de los lectores, quienes en sus ratos libres nos envían una tarjeta postal a nuestro apartado de correos, o bien nos dejan una firma en los post o por Facebook.

En los últimos meses, varios lectores nos han sugerido en alguna que otra ocasión dedicásemos un post a quienes desempeñaron una profesión ya prácticamente extinta como es locutor/presentador de continuidad. Dedicado este post a ellos: Iván y Ángel, que nos lo pidieron hace unos meses en este post, y a MM de Planeta Murciano, quien lo sugirió por Facebook.

¿Qué es una presentadora de continuidad, si eso no lo he dado en la carrera? se estarán preguntando nuestros lectores que hayan estudiado Comunicación Audiovisual mientras limpian con esmero el macroobjetivo de su cámara fotográfica reflex que usan en modo automático. Pues toma apuntes, que esto va para examen.

Una presentadora de continuidad era la persona (generalmente una mujer) encargada de anunciar en un microespacio de televisión todo aquello que a lo largo de la jornada iban a ver los queridos telespectadores, simple y llanamente. La señorita en cuestión aparecía cual busto parlante anunciando la programación, los horarios y sobre qué iban a tratar, invitando a la audiencia a quedarse en casa con los mejores espacios televisivos del momento.

La teoría está muy bien, ya, pero como un vídeo de ejemplo se entiende mejor. En un principio pensamos utilizar de muestra el mítico sketche de Martes y Trece en el que parodían la profesión, pero como este post es un homenaje no a Josema y Millán sino a todas aquellas presentadoras, hemos optado finalmente por reproducir un vídeo de Amelia Muñoz (esposa de Pepe Ruíz «Avelino») en 1982 anunciando la programación de tarde, justo antes de la emisión del programa Bla Bla Bla, cuya sintonía estaba compuesta por el marido de Marisa Medina.

Hablando de Marisa Medina, hay que destacar que la autora de Canalla de mis noches también trabajó en este oficio, así como Isabel Tenaille y Marisa Naranjo.

Con el tiempo, se fue imponiendo paulatinamente el low cost televisivo y las presentadoras de continuidad pasaron en muchos casos a ser locutoras de continuidad, poniendo la voz en off a imágenes de los programas que luego se emitirían, explicando sus virtudes. Aquí escuchamos a Marisa Naranjo ofreciendo la programación de una tarde cualquiera de los noventa, con frases tan elaboradas como «sigan todos en casa porque no deben perderse la entrada a nuestro Club Disney».

Mientras que la presentación de continuidad era terreno femenino, con la locución poco a poco se comenzaron a oír voces también masculinas. A finales de los ochenta, cuando la figura de la presentadora de continuidad estaba de capa caída, se intentó dar un aire nuevo al oficio. Así, Televisión Española decidió que, en lugar de ser auténticas señoras con el pelo enlacado las que avanzasen la información, fuese una zagala de buen ver quien nos contase qué veríamos a continuación. ¿Quién iba a pensar que la moza que daba tranquilamente la programación de 1989 acabaría el personajazo televisivo casposo que es a día de hoy? Así nos comentaba Leticia Sabater la programación de un día cualquiera del año que Nina fue a Eurovision.

Pudiera parecer que las presentadoras de continuidad eran algo arcaico que sólo tenía cabida en la televisión antes de la aparición de las privadas,  y nada más lejos que la Coruña. De hecho, en los pocos años que lleva la cadena Cuatroº en emisión, profesionales como Marta Suárez han pasado por esta labor. Es más, las presentadoras de continuidad han estado unidas a las televisiones privadas desde sus orígenes, y por ejemplo, aquel antiguo Canal + que emitía parte de la emisión en abierto y otra parte en codificado, también tenía una presentadora que anunciaba cada programa, incluyendo la película porno semanal. Por desgracia, no hemos encontrado vídeo de este momento, pero sí de una joven Belinda Washington en los inicios de Antena 3, enseñando piernas y comentando de paso qué se emitirá a lo largo del día, con tanta naturalidad como Carmen Morales en Al Salir de Clase o la Jesulina desfilando.

Sirva pues este post como homenaje a esta profesión que por desgracia tiene tanta cabida en la tele actual como la de presentar un programa infantil, y también a todas aquellas profesionales, incluyendo Leticia Sabater, que desarrollaron dignamente su labor.

Y llegados a este punto, no podemos cerrar el post de otra manera que no sea esta.