Romy Abradelo: «No pienso volver a presentarme a Eurovision. Que hagan perder el tiempo a su padre»

Por Mike Medianoche

El viernes hablábamos sobre Eurovision y el Que me quiten lo bailao, y varios profesionales de la música nos dieron su punto de vista, como la musa de esta web Vicky Larraz, Calaíta, Joaquín Hurtado, Romy Abradelo…

Hablando de Romy (como diría Mayra), a ella le dedicamos el espacio de hoy, porque su currículum lo vale: por sus participaciones en la televisión (¿quién de pequeño no quiso luchar contra ella en la mítica casilla del barro del Gran Juego de la Oca?); por su carrera musical (miembro de Venus a finales de los ochenta, de Baccara, y recientemente de Divas, participantes de la última preselección de Eurovision) y hasta por su familia (hija de la gran Isabel Patton, quien nos dejó hace no mucho tiempo,  y hermana de Ma Ma Ma María Abradelo, presentadora y cantante todoterreno y azafata de nuestro adorado Un Dos Tres durante los noventa, y a quien también nos encantaría algún día poder entrevistar) .

Así pues, tras la precuela del viernes hablando de Eurovision, hoy hablamos con Romy largo y tendido para repasar con ella su carrera. Ahí va.

Entrevista a Romy Abradelo

Uno de tus primeros trabajos como cantante fue junto a la eurovisiva Amaya Sáizar en el grupo Venus, en el que también estaba tu hermana María. De este grupo sabemos poco más que el repertorio, en el que había versiones de Timbiriche y las Flans, y ni siquiera la propia Amaya Sáizar menciona esta formación en su web. Cuéntanos tú ¿cómo surgió este proyecto y qué recuerdas de tu paso por él?

Si te soy sincera, ya ni me acuerdo. Alguien nos vio, nos hizo una prueba, les gustamos y empezamos a formar parte del grupo. Recuerdo que nos lo pasábamos genial, actuamos con los 40 Principales por un montón de sitios. Y también diré que Amaya iba entonces de estrella, pero nosotras nos la comimos. Fue muy divertido.

Trabajaste en El Gran Juego de la Oca en uno de esos papeles estelares a la altura del Flequi o el guerrero de la jaula Maxtor. ¿Cómo llegaste a formar parte de este proyecto y cómo recuerdas tu papel la luchadora del barro en la casilla nº 8?

Me enteré en el gimnasio, donde me lo comentó un compañero con el que había trabajado en el programa Para que Veas, en Canal Sur, presentado con mi hermana también. Me dijo que El Gran Juego de la Oca estaba en producción, y que si no me había enterado del casting. Le dije que no, y él me animó  a que llamase, lo intentara y así fue.  Tengo muy buen recuerdo de ese programa, fue toda una experiencia, y Emilio Aragón me empezó a dar más protagonismo con otras pruebas.

El Gran Juego de la Oca es uno de esos grandes concursos que ya no vemos ni por asomo en la tele, con un gran despliegue de medios y una duración bastante larga. Un par de curiosidades al respecto ¿cuánto tiempo podía durar la grabación de un programa de El Juego de la Oca? ¿Tú sabías de antemano si ese día tenías que pelear o no y con qué concursante?

La grabación dependía del día. Recuerdo especialmente el día antes de Nochebuena, en el cual duró unas 18 horas. Pero todo esto dependía de las pruebas, recuerda que había pruebas muy complicadas, con fuego, explosiones, otras que se desarrollaban en las alturas…  Evidentemente, yo sabía de antemano si tenía ese día prueba o no, ya que antes de la grabación teníamos ensayos, y en las escaletas se veía si el concursante caía en nuestra casilla o no y cómo se iba a desarrollar la prueba.

Unos años después también participaste en otro programa mítico del Telecinco de los noventa como fue Uno para todas, donde junto a Raquel Meroño y Jennifer Rope eras una de las chicas que eliminaban a los concursantes, y en el cual bailabas, cantabas… ¿Cómo fue aquella experiencia?

Uno para todas fue una experiencia fantástica, porque eso de hacer el programa en directo, como se hacía, me encantaba.  Al mismo tiempo era también algo muy agotador, ya que al ser en directo nada podía fallar y por tanto era un no parar contínuo de ensayos y más ensayos todos los días de la semana, incluyendo también los sábados, domingos y festivos. Pero yo estaba encantada de la vida, haciendo lo que me gustaba, cantar y bailar. Poco después de eso empecé con la interpretación, y estuve ocho años por los teatros de España.  Aunque siempre sin abandonar el mundo de la música, mi pasión.

Gracias a Youtube descubrí que te lanzaste en solitario al mundo de la música discotequera, un proyecto sobre el cual no he conseguido recabar ningún dato ¿Llegaste a sacar un disco?

Grabé un disco en solitario de música house, dance, electro… una mezcla explosiva. Nuestro buen amigo Joaquín Hurtado, al que quiero mucho y veo poco, sabe la historia. Él estaba en un programa en Cadena Dial, el cual era de gente que mandaba sus maquetas, e hicieron un concurso de autores e intérpretes de sus propios temas. Ahí estaban metidos en la organización la propia Cadena Dial, la SGAE y BMG Ariola. Joaquín me comentó uno de los días en los que yo estaba en el programa que por qué no presentaba con mis temas. Yo le dije que para qué, si seguramente estaría ya todo hecho. Aún así me presenté, y a las tres semanas me llamaba BMG, con la cual grabé todo el disco e hicimos las fotos correspondiente para la portada y el interior. Pero finalmente hubo un problema interno fuerte dentro de la discográfica, con diferencias entre varios de los jefecillos de BMG, con demandas entre ellos mismos de por medio, y finalmente el disco nunca salió. Con lo que he vivido, si eso me llega a suceder ahora mismo, les meto un puro que no veas.

En la música y has tocado todos los palos, desde la lírica hasta la música discotequera, los ritmos latinos, has trabajado en la revista… ¿Cuál es el estilo en el que te sientes más cómoda?

Me gusta mucho la música dance, pero lo que hago con Divas me llena del todo: la puesta en escena, las coreografías, el vestuario, los temas, y lo más importante, la reacción del público. Maravillosa.

¿Cómo llegaste a ser parte de Baccara en la formación de Mayte Mateos y cómo fue tu paso por este dúo? Tengo entendido que, pese a que no llegaste a grabar ningún disco, sí que hicisteis muchas actuaciones.

Cómo llegué a ser miembro de Baccara también lo sabe bien Joaquín Hurtado, ya que fue él quien me llamó. Mayte no tenía compañera en ese momento, y él me hizo una publicidad maravillosa para que yo ocupase ese sitio, y como vieron que lo que Joaquín les había dicho era cierto, comencé mi andadura en el dúo. Efectivamente hicimos un montón de actuaciones, aunque no se llegó a grabar un disco porque  yo me tuve que ir, ya que empezaba a grabar una serie todos los días y no podía compaginar los dos trabajos, debido a que con Baccara las actuaciones implicaban viajes por toda Europa.

Ahora has retomado el grupo Divas, con una nueva componente que suple el hueco que tu madre dejó ¿Fue Eurovision  el motivo de regresar con el grupo o íbais a volver igualmente?

Eurovision no fue el retorno de Divas. El motivo de regresar era la cantidad de galas que teníamos firmadas antes de irse Isabel Patton. Ella era el alma del grupo, y pensamos en dejarlo, pero yo sé que a ella le gusta que sigamos con el proyecto adelante. Aunque tengo que decir que no ha sido nada fácil para mí.

¿Os explicó TVE por qué a priori os anuncia como finalistas para participar en las galas para representar a España en Eurovision y a última hora os descarta, junto a otras artistas como Sonia y Selena? ¿Pensáis repetir experiencia?

TVE no explicó nada a ningún candidato, y nadie entiende cual fue el criterio para quitar a los precandidatos más votados por los internautas. La cadena pública que pagamos todos hace lo que quiere, y quita y pone a su antojo. Luego me he enterado y he visto otras cositas, por eso no pensamos repetir la experiencia. Que hagan perder el tiempo a su padre.

Por último, ¿cuáles son tus proyectos más inmediatos?

Las galas que estoy haciendo tanto con Divas como yo misma en solitario. También tengo dos colaboraciones en dos series, y hay un proyecto con mi hermana María para el teatro.

Un lujazo de entrevista. ¡Muchas gracias por todo, Romy! Y gracias, una vez más, a Joaquín por el contacto.