Estrella propone amor, la teleserie revelación de 2011

Por Mike Medianoche

Hará un par de semanas, Edu de Peliculeros.es me descubrió la serie revelación de este 2011: Estrella propone amor. No la emite ninguna gran cadena ni cuenta con desorbitados presupuestos. De hecho, este culebrón está realizada con dos duros (seis céntimos, para los chicos nacidos después de que las Azúcar Moreno fuesen a Eurovision) y  se ha rodado y emitido en el municipio de Teba, en Málaga, localidad de la que era una concursante de la época dorada de Allá Tú.

Emulando a Doña Adelaida, la sinopsis de la serie se resume tal que así: Gonzalo es un joven que regresa a Teba diez años después para trabajar como notario. Con su vuelta espera encontrarse con su amor de juventud, Estrella, pero en su camino se cruzará Eugenia, una compañera de trabajo que le seducirá. Casualmente, Estrella tiene una hija llamada María que tiene diez años y cuyo padre no se sabe quién es…

Sí, la trama no es original, pero es que en realidad no es lo importante de la serie. Y es que Estrella propone amor está hecha para fomentar las acciones de la política local, especialmente los llamados «presupuestos participativos», que son reuniones en las que los habitantes del pueblo proponen en qué quieren que se gaste el dinero: mejorar las aceras, crear parques infantiles, o lo que corresponda.  Por ello sin venir a cuento nos encontramos diálogos como «qué mal está la calle, voy a proponer en los presupuestos participativos que la arreglen»; o por ejemplo «¿sabes que en el Ayuntamiento hay una bolsa de trabajo para madres solteras y divorciadas?» «Ah, pues mañana voy a ir a informarme». De hecho, la iniciativa de la serie parte de una técnico de juventud del Ayuntamiento que quería a través de la ficción que los tebeños se implicasen en la política local. Una idea que a título personal me parece brutalmente buena.

La serie no cuenta con un gran despliegue técnico, y de hecho no tiene iluminación, ni decorados, ni siquiera micrófonos; todo está rodado con luz y sonido ambiente. Por ello a veces es difícil entender lo que dicen debido al ruido del fondo, y también se nota mucho cuando se inserta alguna voz en off. Por supuesto está rodado en escenarios reales, es decir, en las calles y comercios del pueblo. Por ello, por ejemplo, si la escena trascurre en una cafetería, podemos ver cómo la figuración del fondo puede aparecer o desaparecer según el plano, o si transcurre en un bar, apreciamos cómo la música que suena cambia entre plano y contraplano. También hay que destacar en este sentido las cortinillas que sirven para unir escenas, que muestran estampas típicas de Teba como sus parques o su casa consistorial; eso sí, todo el rato son los mismos planos recursos, y en diez minutos puedes haber visto el ayuntamiento siete veces, lo que dota a Estrella propone amor de un encanto único. Un encanto al que se suman detalles como que se ruede una escena en una casa y el mando de la tele esté por medio y de reflejo el cristal de la mesa camilla; que suene un móvil suene sin venir a cuento en el desarrollo de una secuencia; que en mitad de un diálogo haya cortes o que la iluminación cambie entre el plano y el contraplano.

De hecho, la mayoría de los actores no son profesionales (sólo la chica que hace de Eugenia lo es, según tengo entendido) y son los propios vecinos del pueblo los que colaboran desinteresadamente. La mejor prueba es los créditos iniciales de la serie, que duran la friolera de dos minutos, en la que figura el nombre de todo el mundo posible, desde los actores protagonistas y secundarios hasta los negocios que participan, tipo Encarni Hipertextil, Modas Estíbaliz, Peluquería Ana Sevillano o Decoración José Manuel.

Como a muchos les habrán entrado ganas de ver la serie, he aquí el primer episodio, subido a internet con la extension wmv. Por desgracia, de los cuatro capítulos sólo hay tres subidos, así que esperemos que algún alma caritativa suba el cuarto para que podamos conocer el desenlace. ¿Será Gonzalo el padre de María? ¿Se quedará con Estrella o con la malvada Eugenia? ¿Qué pasó con todas las cartas que se escribieron Gonzalo y Estrella durante ocho años? Estoy en un sinvivir.

¡Buena semana, sufridores!