La Vuelta al Mundo en 80 Monopolys (I)

Por Mike Medianoche

Hoy es Viernes Santo, y por tanto es fiesta. En la pequeña pantalla fijo que podemos ver hoy alguna reposición de Rey de Reyes, con Carmen Sevilla como María Magdalena, Ben Hur y similares. Si estás harto de pelis eternamente largas y religiosas, puedes sacar tu tablero de Monopoly para echar una partidita con tus amigas. Y es que, junto al Scatergories, el Tabú, y la versión que hicieron de El Precio Justo, el Monopoly es uno de esos juegos de mesa que cualquier sufridor en casa debe tener. Ya sabéis, el juego ese del tablero con cuarenta casillas, muchos billetes, casitas y hoteles.

Con los años, Monopoly ha evolucionado bastante, adaptándose a los tiempos,  mercados y a las ciudades de los países donde se distribuye. Y para acercarte a tu casa lo que in-Teresa, hoy comenzamos un especial que cada mes te llevará hasta tu casa, como el Venca, alguna de las versiones más curiosas que han ido surgiendo desde que en 1903 surgiese el Monopoly primitivo Rojas.

Comenzaremos con lo más recientes y conocido. Para romper esquemas, hace unos años salió al mercado Monopoly DVD,  donde la televisión interactúa con el juego. Así, por ejemplo, un huracán puede chafarte todo el tinglao hotelero que habías conseguido poner con tus esfuerzos.  Y para modernizarse, existe una edición que cambia los billetes por tarjetas de crédito: el Monopoly Electrónico, lo cual me parece un rollo repollo. Todos sabemos lo que mola coger billetes para pagar, e incluso, intentar aflojar algún billetajo de menos… También cabe citar que, durante  el auge de internet, surgió Monopoly Edicion.com, donde podías comprar empresas como Yahoo, Lycos o Ebay. Si se hubiese hecho una versión española, suponemos que se compraría Navegalia u Ole.com, y en vez de casitas, se pondrían tarifas planas a partir de las seis de la tarde a través de tu módem de 56 ks.

No es novedad la existencia de Monopolys para llevarlos encima, como los tampax. Así, existen el Monopoly de Cartas (en varias versiones), el Monopoly Express (que por la foto parece ser más lioso que reunir para una foto a todos los hijos de Julio Iglesias) y el Monopoly de Viaje, el de toda la vida que está junto a la caja registradora en el Toys ‘r us.

Posiblemente, querida lectora, estarás diciéndote que qué rollo, que estas versiones son de sobra conocidas. Y por ello, sacamos ahora nuestro lado más Eva Arguiñano para hablar de comida.  El Monopoly de Chocolate, con calles de pastillas de cacao,  es posiblemente la versión a la que más se juega en casa de Caritina Goyanes.  Pero si, como el que aquí escribes, te encanta el chocolate mas intentas perder esos kilos de más, puedes echar una partida al Monopoly de M&Ms, que será muy dulce pero sin calorías. Y para bajar los M&M, nada mejor que jugar al Monopoly de Coca Cola.

Sufridores en Casa apoya al colectivo gay, ya que sin ellos, no tendríamos éxito, como tampoco lo tendrían Mónica Naranjo, Carmen Lomana o H&M. Por eso, queremos dar a conocer la versión Monopoly Gay, que presenta estereotipos homosexuales leathers, como los del bar La Ostra Azul de Loca Academia de Policía. Y en vez de casitas y hoteles, puedes montar bares y saunas. Así de duro. Aunque si eres gay y vas a quedar para jugar con tu  adorada mariliendre, igual ella prefiere el Monopoly Boutique Rosa, con forma de joyero que incluye hasta un espejo y las edificaciones son tiendas y centros comerciales. O igual, podríais jugar a la edición especial de la tienda de cosméticos Sephora, para que así la peines y la maquilles entre tarjetas de Suerte y Caja de Comunidad.

Cerramos esta primera entrega con un Monopoly de Tablero Hinchable, para poder jugar en el campo, en la piscina o algún sitio donde el suelo no sea óptimo para colocar el tablero de cartón. El Monopoly Rudolph, el reno de la nariz roja de Papá Noel, que es genial para las fiestas navideñas, aunque ahora, en Semana Santa, tiene menos sentido que Prado Berrocal en Cifras y Letras.  Y si ninguna de estas opciones te vale, vete a paseo, sin pasar por la salida y sin cobrar las 20.000 pesetas, con las zapatillas de Monopoly.

El próximo mes volveremos con Monopolys dedicados al cine y a la música. Y recuerda: acepta sólo auténticos Monopolys, rechaza imitaciones.