Melody y Lorenzo Molina en concierto: razones para no perdérselo

Este jueves en Málaga el Teatro Alameda sirvió de marco para el primero de muchos conciertos que van a ofrecer Mélody y Lorenzo Molina. Padre e hija daban por primera vez juntos un recital en público, pese a que ambos llevan ya muchos años dedicados al a farándula. Ella, como ya sabemos, saca discos desde los diez años, y él ha formado parte de grupos como Zibayi o Los Killos y los Trogloditas.

Jamás había visto a Mélody en concierto, ni sola ni acompañada, y me apetecía mucho, y fue una experiencia muy total. Así que si este dúo pasa por tu ciudad no dudes en pillarte una entrada, y aquí te justifico, según lo que yo viví, el por qué merece la pena.

  1. Por Levántate All Stars. Los conciertos vienen anunciados con el faldón de que Melody y Lorenzo han ganado el popular concurso de Telecinco, y de hecho gran parte del repertorio es el que juntos interpretaron en el programa: ‘Loco’, ‘Recuérdame’, ‘Bamboleo’, ‘Al alba’, ‘Caruso’… Incluso los que nos tragamos aquella edición de ‘Tu cara me suena’ podemos ver guiñitos al programa de imitaciones con reinterpretaciones del ‘Achilipú’ o ‘Señora’ de la más grande, aunque aquí no es Mélody imitando a nadie, sino ella cantando como a ella le sale de las entretelas. Además había un photocall gigante para que posases cual Melodier (¿se llaman así los fans de Mélody? Pues deberían).
  2. Por la actitud Rocío Jurado que tiene Mélody. Y es que hablando de la más grande, juraría que Mélody tiene una actitud al pisar al escenario que es lo más cercano a la Jurado que he visto nunca. No ya en la forma de vocalizar y proyectar la voz, sino cómo pisa el escenario y hasta la forma de hacerle algún chiste al público o a sus músicos.
  3. Por el momento Mari Trini de Lorenzo Molina. El papá de Mélody al que le gritaba en el Corte Inglés cuando de pequeña se perdió en su canción ‘De pata negra’ dejó a todos con el culo torcido cuando comentó Mélody comentó que ella de chica oía mucho Mari Trini porque su padre lo ponía a todas horas, e incluso la imitaba. Y así, medio espontáneo medio planeado, Lorenzo se marcó un par de trocitos de Mari Trini en los que el tío clava la voz de la cantautora murciana a la que sus fans paraban en el supermercado para preguntarle por qué no volví a la música.  En el Instagram de Sufridores puedes ver un fragmento de su ‘Amores’. Cierra los ojos y alucina pepinillos. Fue algo que no se esperaba nadie e incluso la tipa que había a mi lado llegó a reírse; yo que sí estoy familiarizado con Mari Trini me llegó a poner los pelos de punta, porque lo bordaba. ¡Lorenzo Molina imitando a Mari Trini en ‘Tu cara me suena’ de artista invitado a la de ya!
  4. Por los modelitos de Mélody. La diva de Dos Hermanas se cambia más de traje que una drag queen en un concurso de Carnavales: trajes luciendo pata negra, otros convirtiéndola en una Evita ibérica, y mucha falda de volante para que ella se la agarre bailando para dejar al personal con el culo torcido. De hecho algún traje iba tan corto que en una de estas que se puso a dar vuelta le vimos ligeramente el culete.
  5. Porque hay mariachis. En cierto momento del concierto hay hueco para un guiño a la música mejicana, y para ello entra un grupo de Mariachis que acompañan a Mélody y Lorenzo para cantar hits como ‘Luz de luna’. Un momento en el que se recuerda, cómo no, a Rocío Dúrcal y a Juan Gabriel.

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    Ele y Lorenzo Molina, antes de que Mélody saliese a decir que Argentina no la llorase
  6. Por Eleazán. A modo de artista invitado aparece Ele, el hermano de Mélody e hijo de Lorenzo (lo especifico porque podía ser lo primero y no lo segundo), que acompaña a su familia para cantar el ‘No llores por mí Argentina’ como hicieron en ‘Levántate’.
  7. Por los momentos «anéeeecdota, anéeeecdota». Como era de esperar padre e hija contaron algunas batallitas entre canción y canción. Mi favorita fue una relacionada con Rocío Jurado, cuando Mélody era pequeña y no la dejaban pasar al camerino, pese a que conocía a la chipionera. Cuando Rocío se enteró que en la puerta había una niña a la que negaban el acceso al camerino y se enteró que era Mélody se pasó la seguridad y el protocolo por la peineta y la invitó vociferando «Pasa, chocho».
  8. Por los jardines en los que se mete Mélody. Además de anécdotas hablaban con el público, y Mélody, que tiene el pensamiento más rápido que la boca, llegaba a abrumarse hablando y sin saber a dónde quería llegar. Incluso una vez se paró a sí misma en plan «Mélody, céntrate». Arte puro.
  9. Por Eurovisión. Los eurofans que vayan a un concierto de esta gira se arañarán la cara fijo al menos en dos ocasiones: cuando ambos cantan como en ‘Levántate’ el ‘Vuelve conmigo’ de Anabel Conde y cuando ‘Mélody’ canta sola ‘Amante de la luna’. Y verla con esa garra me hace pensar, una vez más, que debimos mandarla a ella y no a Soraya al eurofestival de 2009.
  10. Por las coristas a lo Azúcar Moreno. Respaldando a Lorenzo y Mélody había dos chicas sevillanas cuyo nombre no pude apuntar -ni el de los músicos, dicho sea de paso, que los acompañaron fetén- que iban vestidas a lo Toñi y Encarna en Eurovisión, lo cual es delicioso.
  11. Por el público presente. Y es que, entre otros, allí estaban sentados para presenciar el show Manolo Medina (exmánager de Carmina Ordóñez y exparticipante de ‘El Bus’ y también actor y cantante) o José Manuel Parada, que llegó de los últimos pero estuvo un buen rato de pie dando vueltas para que todo el mundo le viese. Y es que ver a Parada a tu alrededor siempre mola.

Redactor freelance. Licenciado en Comunicación Audiovisual y Máster en Publicidad y Márketing.

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