Muere Paloma Chamorro, de ‘La Edad de Oro’

Hoy los años ochenta de España han muerto, al menos un poquito. La periodista Paloma Chamorro ha fallecido en Madrid a los 67 años (edad según Bluper; en otros medios como 20 minutos dicen que 68) . Leer o escuchar su nombre es visualizar a una mujer morena de cardado imposible con una sonrisa maquillada, complemento en el cuello u orejas y con un micrófono descomunal en las manos entrevistando a Alaska, a Loquillo o a cualquier otro artista más moderno de lo habitual de la España ochentera en su programa ‘La edad de oro’.

Este espacio, ‘La edad de oro’ está muy mitificado, pero con razón. Y es que era un formato vanguardista, en el que Paloma traía a artistas variopintos para dejarles hacer lo que mejor saben (cantar, hablar, exponer su obra o lo que encartase), y ella los hacía más cercarnos al espectador a través de locuaces entrevistas con preguntas que se salían del tiesto. Ríete tú de las cosas que se preguntan en el polígrafo de ‘Sálvame’ o en el Chéster de Risto.

Ella y solo ella es capaz de empezar una entrevista a una banda musical preguntando si «¿es verdad que sois un grupo cutre?», como hizo a Derribos Arias, mientras había gente por allí aporreando instrumentos y no dejando casi que se oiga ni a entrevistadora ni a entrevistados. «¿Vais a apagar la televisión cuando hablemos de libros?» fue otra de sus bombas, la cual preguntó a Eduardo Benavente de Parálisis Permanente en el programa en el que cantó ‘Quiero ser santa’ y ‘Tengo un pasajero’ en el plató del programa. Algo a lo que el cantante respondió, más o menos, que depende del libro al que estén haciendo referencia.

Antes que en ‘Sálvame’, en ‘La edad de oro’ ya se hablaba de drogas si hacía falta, y hasta se corta a un entrevistado si iba más puesto que Ortega Cano en una boda. Por ejemplo, en un reportaje que hicieron en homenaje póstumo al artista Ocaña entrevistó a su amigo Nazario, quien iba manifiestamente perjudicado y con una dicción un tanto difícil.  Nada más empezar Paloma intentó que a su invitado no se le fuese mucho la pinza, y sentención: «qué pasado estás, Nazario. Abrevia que estás pasadísimo».

De todos modos, Paloma tenía un discurso antiadicciones. A Los Rebeldes les dijo a bocajarro «Hablemos de drogas (…) ¿Tenéis tantos amigos arrasados (por la droga) como yo y estáis hartos?«. O a un componente de Derribos Arias, al que dijo «¿te han dicho que las anfetas se comen las neuronas?» También habló de drogas con Pedro Almodóvar, cuando presentó su ‘Tráiler para amantes de lo prohibido’, aquella minipelícula para promocionar ‘Qué he hecho yo para merecer esto’. Pero tampoco hay que creérselo mucho. La Chamorro le preguntó por la vez anterior que visitó el programa -cuando fue acompañado por Fabio McNamara e hicieron performances en el escenario que incluía a Fabio esnifando laca para el pelo, la misma que echaba a una fregona poco antes- y le preguntó cómo había cambiado su vida. Pedro respondió que en ese paréntesis de dos años había descubierto gustos diferentes. «Antes tomaba café, el café lo sustituí por la cocaína, y la cocaína por la morcilla con arroz», atribuyendo a esta última valores románticos. Tampoco puedo pasar por alto la entrevista que hizo a Almodóvar y McNamara, en la que preguntaba al dúo que cuál era la mayor estupidez que habían dicho sobre ellos, a lo que Fabio respondió «que somos chicos, que estamos locas». En esa misma entrevista, Fabio se definió como una mujer superficial, y Paloma fue rápida y le dijo que «como mujer superficial te haré una pregunta a tono, ¿dónde vas a ir de vacaciones?».

En ‘La Edad de Oro’ solía acudir un grupo recurrente de artistas (a Loquillo, por ejemplo, le llegó a decir que iban a tener que meterlo en nómina) y se respiraba cierto amiguismo, pero Paloma Chamorro no se cortaba en criticar esto. Por ejemplo, cuando entrevistó a Javier Mariscal y le preguntó por sus pintores favoritos, y el padre de Cobi se justificó diciendo que él no entiende de arte clásico, pero empezó a dar nombres de autores contemporáneos. Algo que Paloma resumió con la frase «los amiguetes una vez más, ¿no?».

En ‘La Edad de Oro’ se hablaba incluso de política, y Paloma dejaba a la gente hablar de ideas políticas contrarias a las suyas. Como aquella vez que acudió La Frontera a presentar el vídeo ‘Duelo al sol’, el cual uno de sus componentes dedicó al entonces electo presidente Ronald Reagan, al que querían «darle nuestra enhorabuena por cuatro años más». «¿Me lo dices en serio? Bueno, pues nada, te dejaré que lo digas, no te voy a callar la boca, me das un disgusto, pero bueno. Luego le pegáis vosotros», respondió Paloma, sin saber si era ironía o si al muchacho se le había ido la cabeza.

Paloma con su discurso rompía las normas establecidas, hasta la formación universitaria. Al entonces joven ilustrador Fernando Vicente, que contó cómo al acabar COU no consiguió entrar en la facultad de Bellas Artes, algo que la Chamorro aplaudió. «¿Cómo se te ocurrió eso, crees que te sirve para algo?» El muchacho contó que no lo admitieron por unas décimas, y ella dijo que qué suerte tuvo.

También es fascinante la entrevist a Los Chunguitos, a los que preguntó «Nunca habéis estado en la cárcel. ¿De dónde, cómo podéis recrear los sentimientos de un preso sin haber estado nunca en el maco?» a lo que ellos respondían que por gente de su entorno. Y poco después les preguntó por canciones sobre la heroína y que si son millonarios, porque ella lo mismo preguntaba sobre el maco que sobre el dinero que tenía su entrevistado en el banco.

 Y es que en ‘La Edad de Oro’ podía pasar casi cualquier cosa. Desde que un artista acuchillase cuadros a modo de performance hasta que un grupo como Glutamato Yeyé cantase ‘Todos los negritos tienen hambre y frío’ mientras tiran barras de pan al público, y éste a su vez respondiese tirándoselo al cantante, que tiene que acabar la canción en directo resguardándose detrás de una silla. Y todo ello se lo debemos a Paloma Chamorro, no solo presentadora sino también directora del mismo.