Cuando en ‘QQCCMH’ se comparó a los bebés negros con conguitos

La marca de chocolatinas Conguitos está en el punto de mira. Con medio mundo volcado con el movimiento antirracista Black Lives Matter tras la muerte de George Floyd estamos viendo cómo obras de ficción como ‘Lo que el viento se llevó’ o ‘Las chicas de oro’ han tenido que suprimirse de catálogos de plataformas.

En España, hay un Change.org para que Lacasa deje de usar la marca Conguitos, por usar “la ilustración caricaturesca de un hombre negro con grandes labios rojos”, lo que en teoría es un pequeño habitante del congo, un conguito.

El logo de la empresa era inicialmente un grupo tribal empuñando lanzas, y con los años fue cambiando asociándose a estereotipos raciales como el breakdance o el rap. Hubo un anuncio en el que estas golosinas se transformaban en celebridades negras como Tina Turner o Stevie Wonder.

Hay gente que está a favor de la retirada, y otros en contra, por estar en una ‘dictadura de lo políticamente correcto’. Encontramos líderes de opinión como Susanna Grisso que asegura tener “dudas” con el nombre, sobre todo, porque tiene una hija de raza negra.

Mientras, la marca tiene la “intención de valorar la implementación de mejoras oportunas” pues se preocupan de que “la imagen de marca que se esté transmitiendo no sea bien percibida por algunas personas”.

Sin entrar o no en la dictadura de lo políticamente correcto o no, hay que aplaudir que la gente se cuestione cosas que se dan por hechas (como ocurrió en ‘OT’ con el tema mariconez). Porque durante años hemos escuchado chistes o comentarios racistas con los que nadie se inmutaba.

Por ejemplo, en el año 2012, vimos una edición de ‘¿Quién quiere casarse con mi hijo?’ en el que una mamá era abiertamente racista. Pilar, la madre de Daniel, aseguró que las negras “me huelen mal, es algo que me rechaza, tienen granos y las veo que van como descuidadas” y que no quería una mujer así para su churumbel. Sin embargo, en un alarde de tolerancia, aseguró que “los bebés (negros) sí me gustan, son como conguitos”.

Si el programa estuviese disponible en MiTele a día de hoy seguro que se hacía una campaña para que Mediaset lo retirase de su catálogo, como ocurre con ‘Las chicas de oro’. Entonces, sin embargo, nadie se inmutó, y aunque en prensa se recogieron aquellas declaraciones, no se exigió disculpas ni la cancelación del formato ni un boicot contra los anunciantes. Y eso que Twitter ya estaba on fire. ¿Qué habría ocurrido a día de hoy con semejantes declaraciones?