Sufridores en la Feria de Málaga

Por Mike Medianoche

Desde el pasado viernes y hasta finales de esta misma semana, Málaga, la tierra que vio nacer a Terelu y a Esther Aranda entre otras, celebra su tradicional feria de agosto, y nosotros, con todo nuestro cariño, te ofrecemos todo lo que in-teresa de estos festejos, indicándote qué deberías visitar como buen sufridor en casa.

«¿Y qué tiene de SEC la feria de Málaga?» te preguntarás. Pues mucho, querida amiga, ya que las referencias al mundillo de los Sufridores son múltiples y constantes.

Así, en el Real de la feria, encontramos una atracción que debe ser parada obligatoria para cualquier sufridor que se precie. Una atracción de la que dudamos que pague derechos de imagen y que es un monumento a un programa clave en la televisión de los noventa y los dosmils: el Grand Prix.

La atracción es un batiburrillo de suelos que se mueven, toboganes y ruedas, rollo la escena del baile final de Grease. Pero eso no es lo que nos interesa, sino su estética: con un logo que plagia al original de TVE, muchas vaquillas pintadas y estatuas y un audio en bucle con la la sintonía original del concurso para reclamar al público. Pero sin duda, lo más delicioso es el homenaje a Ramón García, quien se encuentra en forma de dibujo y de muñeco en varias partes de la atracción. Arte puro.

Además, si algo caracteriza a la feria de Málaga es cómo es capaz de mezclar el arte andaluz con cualquier otro género, algo así como hace el grupo Las Seventies, que son capaces de hacerte una versión flamenca del Wannabe de las Spice Girls. En concreto, la atracción en la que podemos mejor apreciar esto es en La montaña del terror, la típica atracción de cuatro plantas en la que a cada esquina te sale un monstruíto que en teoría da susto, y que, de una manera innovadora, también incluye a actores que te asustan por el camino. Y no, la manera de mezclar terror y folclore no es ponerte a la Pantoja al final de un tunel oscuro. Pero sí poniendo a Isabel (o al menos una muñeca que recuerda bastante a la madre de Chabelita) como víctima de un Freddy Krugger que sostiene a la folclórica en brazos a lo King Kong.

Son muchas más las atracciones que debe visitar un buen sufridor en casa, como una llamada Torrente 5, con un gran dibujo de Santiago Segura y que es muy parecida a la del Grand Prix. Aunque parezca un viaje al futuro, sigue siendo una atracción y no desvela nada de Torrente 4, actualmente en grabación y que ya sabemos que contará con Paquirrín, la Esteban y Ana Obregón. Y también son muy recomendables los clásicos castillos hinchables que recrean éxitos de Disney o Dreamworks, rollo «la Disneylandia de los pobres».

Ahora, dejemos la gastronomía y pongámonos culinarios. Y en feria, hablar de comida significa una visita obligada a Hamburguesas Uranga, clásico puesto de feria que se publicita con unas cuñas tan atractivas que le han hecho merecedoras de tener un club de fans en facebook, en el cual se puede escuchar dicho anuncio de manera íntegra.

Además, hay otros manjares típicos de feria, además del Cartojal, como son los clásicos algodones de azúcar, las manzanas de caramelo, las patatas asadas o el turrón. Porque el turrón no se come única y exclusivamente en Navidad, sino en cualquier fiesta siempre que te lo pongan por delante. Y claro, si el puestecillo en el que lo venden tiene algo que toque la fibra sensible del fan del Un Dos Tres es fácil caer en la tentación.

La feria de Málaga es todo esto y mucho más, pero querida lectora, te invitamos a que visites Fergolandia. Y recuerda tomarte un vinito como nos indicaba en su día Carmen Sevilla en el Telecupón: «Málaga Virgen en tu copa, muy muy frío es natural».